El ahorro es el objetivo por excelencia de las personas cuando hablamos de su economía personal y doméstica. Sin embargo, en ocasiones puede ser complicado o difícil de ser constantes si no se tiene un método; por lo tanto compartimos maneras divertidas en las que puedes jugar mientras ahorras.
Es importante la planificación financiera, es decir, el conocimiento y organización de nuestros gastos e ingresos para poder responder ante nuestras obligaciones (la renta, el pago de un préstamo, la escuela, etc.) y nuestras necesidades y deseos (la compra en alimentación, el ocio, etc.), guardando una parte para posibles imprevistos.
Muchas veces el ahorro en ves de verse como algo que nos ayudará a lograr metas a corto y largo plazo, o darnos tranquilidad financiera para unos años, suele verse como una obligación más, esta percepción negativa contribuye a que cueste más lograrlo.
Puedes cambiar esa percepción negativa y divertirte en familia, jugando mientras ahorras; éstas son algunas ideas que puedes llevar a cabo y elegir las que mejor te funcionen:
Estos son algunos ejemplos que se pueden poner en práctica para ello:
El cofre del tesoro
Ideal para los niños de la casa. Elige una caja, cofre, baúl o botella para que se puedan ir echando todas las monedas o billetes, ya sea que planeen una cantidad diaria, o simplemente se vayan juntando las monedas de los cambios, las que encontraste en tu bolsillo o bolsa, encontraste tiradas, etc. Aunque sean montos pequeños, se irá acumulando una cantidad de dinero.
Ranking responsable
En este caso, es importante la participación de todos los miembros del hogar. Inicialmente, hay que definir las actividades y los puntos asociados a cada una de ellas. Por ejemplo, 5 pesos por cerrar la llave mientras te enjabonas en la regadera, ahorrar agua 10 pesos, 15 pesos por apagar las luces que no se ocupan, etc. Al final de la semana, se hará un recuento individual entre todos los participantes de la casa, viendo quién ha ocupado la primera posición. El ganador podrá disfrutar del beneficio que se acuerde, como elegir una película, su comida favorita para el día siguiente, etc.
Los impuestos por la conciliación
Por el contrario, en este juego se trata de lo contrario, pues aquellas conductas negativas tendrán como consecuencia una pequeña “multa” económica en casa. Por ejemplo, decir groserías 5 pesos, tardarse más de 10 minutos en bañándose 10 pesos, no hacer la tarea 15 pesos, usar el teléfono mientras se come en familia 20 pesos, etc., la familia definirá las conductas negativas y su monto. Al final del año, el dinero recaudado será destinado a la actividad que elija la familia.
Un día sin gastos
Este reto consiste en no gastar nada durante 24 horas. De esta forma, se pueden buscar actividades gratuitas para realizar en grupo o de manera individual como visitar exposiciones de arte gratuitas, dar un paseo en bicicleta o quedar con un grupo de amigos para patinar al aire libre. Este reto puede aplicar por ejemplo los fines de semana.
Ahorro semanal
Todos los años tienen hasta 52 semanas y este número será el protagonista del juego. Cada semana, el participante o los participantes deberán meter en un monedero o recipiente tanto dinero como el número de la semana del año en la que estemos. Por ejemplo, en la décima semana del año deberán meter diez pesos. Al principio, resultará sencillo, ya que las primeras semanas es poca cantidad; pero, a medida que avance el año, estas se incrementarán.
Esta forma puede ser ideal para un viaje al año siguiente a un destino que llevamos deseando mucho tiempo.
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